En este momento de transición que vivimos como humanidad, hemos estado recibiendo al Coronavirus como un mensajero y maestro. Hemos sentido que es momento de mirar hacia el interior y, cuando nos referimos al interior, también estamos siendo conscientes de la interdependencia que nos hace inseparables de otros seres humanos y otro-que-humanos. Entonces, esa conexión interior la estamos viviendo como una oportunidad para entrar en reflexiones profundas frente a cómo queremos relacionarnos con la vida que tenemos ahora y con la muerte que a todos nos aguarda.
Nuestro inconsciente colectivo presentía la llegada de este mensajero –sentimos–, porque en enero vivimos una experiencia intensa que nos siguió preparando física, emocional y espiritualmente para asumir nuestra responsabilidad en medio de la incertidumbre. Se trata del encuentro de semillas de Re-Conectando, una sincronía que nos permite hoy seguir unidos/as y presentes desde un compromiso infinito con ese deseo existencial y colectivo de vivir en armonía con la naturaleza – el Buen Vivir. Queremos compartirles un video que nos inspira, nos llena de calma, y nos invita al cuidado colectivo en estos tiempos. Sembrar vida y sembrar amor para nuestra casa común es la vacuna que hemos encontrado para sostenernos y para seguir andando.
Viajando juntos/as hacia el Vientre de la Madre Tierra
Con este newsletter queremos seguir tejiendo voces, ilusiones, reflexiones y familia. El Padre Francisco de Roux nos recordó que cada uno y cada una de nosotros es un tesoro único en el universo, y que si cumplimos con poner nuestras medicinas al servicio de la vida, veremos efectos extraordinarios en este gran organismo que somos en colectivo. Por eso, querida familia, les invitamos a que nos acompañen en este viaje, y a que juntos/as nos Re-Conectamos con nosotros, con otros y con nuestra Madre Tierra. Estamos felices de poder llegar a ustedes y esperamos que lo disfruten igual que nosotros.
¡Hasta la próxima!
